La Iglesia peruana admite la expulsión de un obispo acusado de pederastia
El presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, monseñor Salvador Piñeiro, ha confirmado la destitución del obispo auxiliar de Ayacucho, Gabino Miranda, decretada por el papa Francisco, después de haber sido acusado de pederastia.
Por medio de un comunicado, ha explicado que a su regreso de Estados
Unidos se enteró "con amplitud" sobre la situación de la Iglesia de
Ayacucho, a 530 kilómetros al sureste de Lima, "por la triste noticia de
quien fuera su obispo auxiliar", según recogen diversos medios
sudamericanos. El caso ha levantado polémica porque hasta ahora la
Conferencia Episcopal Peruana había asegurado que no tenía constancia de
la expulsión, decretada por Francisco en julio.
Piñeiro ha explicado ahora que el pasado 5 de julio fue notificado verbalmente por la Nunciatura Apostólica sobre la decisión de Francisco de imponer la pena de dimisión a Miranda "por pecados contra el sexto mandamiento, en proceso sujeto al Secreto Pontificio".
El Ministerio Público peruano ha abierto una investigación "para que la verdad sea conocida", que también es respaldada por el propio Piñeiro. El presidente de la Conferencia Episcopal también ha señalado que durante los dos años que está al frente de la Iglesia en Ayacucho "nunca" ha recibido una denuncia contra el exobispo.
La sanción que ha aplicado la Santa Sede a Miranda es la más rigurosa de las penas para un clérigo: la pérdida total del estado clerical. "Finalizo pidiendo a los hijos de la Iglesia comprender el dolor que todos sentimos por este hecho y ruego sus oraciones para que seamos sacerdotes y fieles según el corazón de Cristo", ha concluido.
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/10/01/actualidad/1380627969_275855.html
Piñeiro ha explicado ahora que el pasado 5 de julio fue notificado verbalmente por la Nunciatura Apostólica sobre la decisión de Francisco de imponer la pena de dimisión a Miranda "por pecados contra el sexto mandamiento, en proceso sujeto al Secreto Pontificio".
El Ministerio Público peruano ha abierto una investigación "para que la verdad sea conocida", que también es respaldada por el propio Piñeiro. El presidente de la Conferencia Episcopal también ha señalado que durante los dos años que está al frente de la Iglesia en Ayacucho "nunca" ha recibido una denuncia contra el exobispo.
La sanción que ha aplicado la Santa Sede a Miranda es la más rigurosa de las penas para un clérigo: la pérdida total del estado clerical. "Finalizo pidiendo a los hijos de la Iglesia comprender el dolor que todos sentimos por este hecho y ruego sus oraciones para que seamos sacerdotes y fieles según el corazón de Cristo", ha concluido.
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