'El futuro de Afganistán depende de que las mujeres recuperemos la dignidad'
"Las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres. No es ya que no deberían anularnos, sino que es fundamental que trabajemos junto a ellos. En Afganistán la mayoría de las mujeres son analfabetas. No pueden defenderse porque no conocen sus derechos, y no pueden educar a sus hijos porque ellas tampoco están educadas. Llevamos ya diez años sufriendo una guerra civil, por lo que se ha instalado la cultura de la violencia. Y si las nuevas generaciones no aprenden a concebir la realidad de otra manera, va a ser imposible erradicar el machismo, la agresividad y la ausencia de igualdad de nuestra sociedad." Este es el resumen que Humaira Haqmal hizo sobre la sociedad afgana actual en una conferencia sobre la lucha por los derechos de la mujer ofrecida ayer en la Universidad CEU San Pablo.
Haqmal es presidenta del Movimiento de las Hermanas Afganas y profesora de Derecho y Ciencias Políticas en la Universidad de Kabul, por lo que sabe cuáles son las carencias de su entorno y cuál es el camino para tratar de evitar que se hagan endémicas. "Lo primero que hay que conseguir es un sistema social justo. Y una de las claves para lograrlo está la mentalidad de la gente. Es indispensable recuperar los derechos de las mujeres y hacerlos valer para devolverles la dignidad. A partir de aquí, todos juntos, tenemos que luchar fomentar la participación tanto en política como en el resto de ámbitos que configuran cualquier sociedad", explicó.
La Ley para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, en vigor desde agosto de 2.009, podría ser un primer paso para cambiar poco a poco el concepto de justicia que se tiene en Afganistán. Una ley que, según un reciente informe de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, no se ha aplicado en la mayor parte de los casos de agresiones a mujeres. "¿Cómo la van a aplicar, si no se ha aprobado?", aclaró a ELMUNDO.es Haqmal. "Afganistán no atraviesa una situación normal. Es verdad que tanto el presidente como el Parlamento la aceptaron, pero nadie la ha refrendado y, por lo tanto, no puede ponerse en práctica."
Dentro de este caos que denuncia Haqmal, las mujeres son el eslabón más vulnerable de la cadena. Un ejemplo reciente lo encontramos en Gulnaz, la mujer que quedó embarazada a los 19 tras haber sido violada, que fue condenada a 12 años de cárcel como culpable de un delito de adulterio. Después de pasar dos años en prisión, el tribunal le dio la opción de casarse con su agresor para redimir sus pecados. Gulnaz eligió el matrimonio para que su hija no tuviera que crecer entre rejas. Ahora busca el perdón del presidente afgano con la esperanza de sentar un precedente legal para todas las mujeres que pasen por la misma situación.
Además de la profunda desigualdad, Afganistán atraviesa una situación muy delicada. "Por un lado tenemos un problema interno basado en que el dominio talibán dificulta la transición hacia un sistema democrático e igualitario", explicó Haqmal. "Y ahora Estados Unidos ha anunciado su intención de abandonar Afganistán, algo con lo que no estoy de acuerdo. Tanto Pakistán como Irán, nuestros países vecinos, prefieren que no tengamos una política fuerte para seguir interviniendo en nuestros asuntos. Si las tropas estadounidenses se marchan, desaparecerá la barrera de contención, nos quedamos desprotegidos."
Humaira Haqmal no quiso despedirse sin destacar la labor del Ejército español en su país. "Tampoco estoy contenta con la desafortunada situación de los españoles en Afganistán. Los siento como mis hermanos, y no se imaginan cuánto agradezco que estén sacrificándose por los afganos solo para ayudarnos", dijo. Un trabajo que quiso destacar la fundadora y presidenta de la Fundación Cometa, Fuencisla Gozalo, quien también participaba en la conferencia . "La labor militar no se limita a darle seguridad a los afganos. También han creado un departamento de español para enseñarles Lengua y Literatura, les ofrecen trabajo… Afganistán no es el mismo país que reflejan los medios de comunicación. Sus habitantes están deseando cambiar, deseando progresar, porque saben que la vía para su estabilización pasa obligatoriamente por la educación."
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/11/29/solidaridad/1322557059.html
Haqmal es presidenta del Movimiento de las Hermanas Afganas y profesora de Derecho y Ciencias Políticas en la Universidad de Kabul, por lo que sabe cuáles son las carencias de su entorno y cuál es el camino para tratar de evitar que se hagan endémicas. "Lo primero que hay que conseguir es un sistema social justo. Y una de las claves para lograrlo está la mentalidad de la gente. Es indispensable recuperar los derechos de las mujeres y hacerlos valer para devolverles la dignidad. A partir de aquí, todos juntos, tenemos que luchar fomentar la participación tanto en política como en el resto de ámbitos que configuran cualquier sociedad", explicó.
El dominio talibán y el deseo de control de Irán y Pakistán, son las principales amenazas para el país
Dentro de este caos que denuncia Haqmal, las mujeres son el eslabón más vulnerable de la cadena. Un ejemplo reciente lo encontramos en Gulnaz, la mujer que quedó embarazada a los 19 tras haber sido violada, que fue condenada a 12 años de cárcel como culpable de un delito de adulterio. Después de pasar dos años en prisión, el tribunal le dio la opción de casarse con su agresor para redimir sus pecados. Gulnaz eligió el matrimonio para que su hija no tuviera que crecer entre rejas. Ahora busca el perdón del presidente afgano con la esperanza de sentar un precedente legal para todas las mujeres que pasen por la misma situación.
Además de la profunda desigualdad, Afganistán atraviesa una situación muy delicada. "Por un lado tenemos un problema interno basado en que el dominio talibán dificulta la transición hacia un sistema democrático e igualitario", explicó Haqmal. "Y ahora Estados Unidos ha anunciado su intención de abandonar Afganistán, algo con lo que no estoy de acuerdo. Tanto Pakistán como Irán, nuestros países vecinos, prefieren que no tengamos una política fuerte para seguir interviniendo en nuestros asuntos. Si las tropas estadounidenses se marchan, desaparecerá la barrera de contención, nos quedamos desprotegidos."
Humaira Haqmal no quiso despedirse sin destacar la labor del Ejército español en su país. "Tampoco estoy contenta con la desafortunada situación de los españoles en Afganistán. Los siento como mis hermanos, y no se imaginan cuánto agradezco que estén sacrificándose por los afganos solo para ayudarnos", dijo. Un trabajo que quiso destacar la fundadora y presidenta de la Fundación Cometa, Fuencisla Gozalo, quien también participaba en la conferencia . "La labor militar no se limita a darle seguridad a los afganos. También han creado un departamento de español para enseñarles Lengua y Literatura, les ofrecen trabajo… Afganistán no es el mismo país que reflejan los medios de comunicación. Sus habitantes están deseando cambiar, deseando progresar, porque saben que la vía para su estabilización pasa obligatoriamente por la educación."
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/11/29/solidaridad/1322557059.html
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