Dolce y Gabbana, en el baquillo

Dolce y Gabbana, en el baquillo
 
Estamos habituados a verlos en las pasarelas, en fiestas maravillosas, tomando el sol a bordo de su magnífico yate, en las páginas en papel satinado de las revistas de moda, rodeados de seductoras modelos, en compañía de su amiga Madonna, paseando del brazo de su querida Naomi Campbell... Pero, a partir del lunes, los estilistas italianos Domenico Dolce y Stefanio Gabbana nos sorprenderán con un escenario inédito: el banquillo de los acusados.
 Los dos diseñadores, que desde que en 1985 decidieron unir su genio creativo han cosechado un enorme éxito en el mercado de la moda y el lujo, están acusados de haber evadido impuestos a lo grande. Entre los años 2004 y 2005 habrían sustraído a las arcas públicas italianas unos 420 millones de euros... cada uno. Y a esa cifra habría que sumar además otros 200 millones de euros que habrían escamoteados a la Hacienda italiana a través de una sociedad con sede en Luxemburgo. Es decir: que habrían evadido más de 1.000 millones de euros entre los dos. El lunes está previsto que arranque en Milán el proceso contra los dos estilistas, a quienes la Justicia italiana tiene en el punto de mira desde hace tiempo. De hecho, fue hace ya varios años cuando la pareja de diseñadores -que siguen siendo pareja artística aunque rompieron su relación en 2005- fue acusada de haber trasladado a Luxemburgo la sede de su compañía para de ese modo no tener que pagar impuestos en Italia, con notables beneficios para su bolsillo. Una acusación que Dolce y Gabbana siempre han rechazado rotundamente.

Absueltos de estafa

En abril pasado, la pareja de diseñadores se vio absuelta de la acusación de haber estafado al Estado italiano y de haber declarado unos ingresos inferiores a los reales. "Los hechos no subsisten", sentenció el juez milanés Simone Luerti. Posteriormente, el Supremo italiano confirmó la absolución de los estilistas por el delito de estafa al Estado.
 Sin embargo, el más alto tribunal italiano anuló el que se hubiera retirado la acusación contra Domenico Dolce y Stefanio Gabbana de haber cometido un delito fiscal al haber falseado sus ingresos. Y es de ese presunto delito del que los diseñadores de la famosa firma D&G deberán de rendir cuentas a la Justicia a partir del lunes.
 Pero, por si fuera poco, los dos diseñadores también podían tener problemas con el fisco estadounidense. Según publicaba recientemente il Sole-24Ore, el principal diario económico italiano, la Hacienda norteamericana reclama unos 15 millones de dólares a los estilistas no declarados en el periodo 2009-2011.
 La marca Dolce y Gabbana está presente en 40 países del mundo a través de una red de 251 tiendas exclusivas. En el ejercicio fiscal 2010/2011, que se cerró el 31 de marzo del año pasado, el grupo declaró unas ventas globales por valor de 1.416,5 millones de euros.
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/11/30/gentes/1354305548.html