El rey (del cotilleo televisivo) está desnudo Jorge Javier Vázquez @jjaviervazquez está desnudo
Los asiduos a los ubicuos y variopintos formatos de @salvameoficial pensarán que ya habían visto a @jjaviervazquez en todas las situaciones posibles. Pues no. Las redes sociales echaron humo tras la publicación el jueves de su primer desnudo en @PrimeraLineaMag. Ahora o nunca, habrá pensado el presentador que hace apenas un mes regresó a Twitter tras un primer intento en 2011. «Espero no meter mucho la pata», fue su declaración de intenciones en el primero de los 35 tuits que lleva escritos. «Cuánto tengo que escribir al día para no hacerme pesado?», pregunta titubeante para sorpresa de su público, acostumbrado a unas maneras mucho más resolutivas al frente de la caterva que pastorea en el plató. Son precisamente sus compañeros de cháchara los protagonistas casi exclusivos del timeline de @jjavervazquez, a quienes retrata sin piedad (Lydia Lozano con rulazos, @kiko_Hernandez comiéndose un bocadillo, Víctor Sandoval desfigurado en maquillaje...). Curiosamente, mantiene su intimidad a salvo, él que hurga lo que puede en la de los demás. Con una excepción: una foto en albornoz, un domingo por la tarde, tiernamente abrazado a Cartago. «La felicidad». Aunque la «exclusiva» decae si se tiene en cuenta que Cartago es su perro. Así se empieza.
El Flash
Y ahora vas y lo tuiteas
Hacerse una foto con @jjaviervazquez entraña un serio riesgo para la propia reputación digital. Acostumbrado a sacar lo peor del famoseo, sus autorretratos nunca dejan en buen lugar al acompañante. «Lydia también se está preparando, aunque no lo parezca», tuitea con intención junto a esta foto que su colaboradora querría quemar.http://www.larazon.es/detalle_normal/noticias/1948379/gente+la-razon-del-sabado/el-rey-del-cotilleo-televisivo-esta-desnudo
“Dios es amor mejor con humor” trata de acercar El Antiguo Testamento a todos. La dosis de humor intenta facilitar la comprensión del Libro Santo. Siempre con respeto y con matices didácticos nunca pierde la parte espiritual y sensible de un conjunto de textos tan antiguos como actuales. Para traernos a un Dios que sigue con nosotros. Que nos perdona a pesar de las torpezas y debilidad del hombre. Que sigue con el pueblo elegido. Porque los elegidos somos los que nos dejamos elegir.
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