Nike lanza un hiyab de competición destinado a las atletas musulmanas
El producto, Hijab Pro, no estará en el mercado hasta la primavera de 2018, pero el vídeo que adelanta su salida ya se ha hecho viral
Nike ha anunciado un hiyab de competición destinado
a las atletas musulmanas. Aunque el producto, Hijab Pro, no estará en
el mercado hasta la primavera del año que viene, el vídeo que adelanta
su salida ya se ha hecho viral. Para muchas mujeres se trata de un
avance casi revolucionario, ya que va a facilitar su participación en el
deporte, algo controvertido en las sociedades islámicas conservadoras y a lo que no ayuda la falta de prendas adecuadas.
“Que
una marca como Nike salga y diga que [las atletas musulmanas que se
cubren] existen y que quieren incluirlas es un gran paso”, ha declarado a
la cadena Al Arabiya English la corredora egipcia Manal Rostom,
una de las primeras en probar el Hijab Pro y que aparece en el vídeo de
la marca deportiva. En su opinión, “no se trata solo de ofrecer un
producto a las mujeres árabes y musulmanas, sino de dar una oportunidad a
aquellas que aplazan la idea de llevar el velo para competir”.
A las dificultades que las musulmanas han tenido que vencer en sus sociedades para competir, se ha sumado durante años el rechazo al hiyab de muchas instituciones deportivas. La FIFA solo levantó la prohibición en 2014; la de baloncesto, la FIBA, aún la mantiene. Cuando en los Juegos Olímpicos de 2012 la presión internacional logró que Arabia Saudí enviara finalmente a dos mujeres, la judoca Wojdan Shahrkhani estuvo a punto de no pisar el tatami porque los jueces consideraron inicialmente que su hiyab resultaba peligroso.
A la necesidad de flexibilidad para reducir el riesgo de ahogamiento en caso de un tirón, se unía también el reto de que se mantenga en su sitio a pesar del movimiento que requiere el ejercicio y que no dé demasiado calor. “El Hijab Pro está hecho de una sola capa de poliéster fino y tiene pequeños agujeros para hacerlo traspirable”, explica el texto sobreimpreso en el anuncio.
Nike, que el mes pasado lanzó un anuncio celebrando los éxitos de cuatro deportistas árabes rompiendo tabúes locales, apuesta ahora por la otra cara del problema: la normalización del hiyab
en el deporte. No todo el mundo está de acuerdo, tal como se puede
comprobar en las redes sociales. Bajo la etiqueta #NikeProHijab hay
quien critica el oportunismo comercial e incluso quien acusa a la firma
de “capitalizar el patriarcado islámico poniendo su marca en un casco de castidad”.
A las dificultades que las musulmanas han tenido que vencer en sus sociedades para competir, se ha sumado durante años el rechazo al hiyab de muchas instituciones deportivas. La FIFA solo levantó la prohibición en 2014; la de baloncesto, la FIBA, aún la mantiene. Cuando en los Juegos Olímpicos de 2012 la presión internacional logró que Arabia Saudí enviara finalmente a dos mujeres, la judoca Wojdan Shahrkhani estuvo a punto de no pisar el tatami porque los jueces consideraron inicialmente que su hiyab resultaba peligroso.
A la necesidad de flexibilidad para reducir el riesgo de ahogamiento en caso de un tirón, se unía también el reto de que se mantenga en su sitio a pesar del movimiento que requiere el ejercicio y que no dé demasiado calor. “El Hijab Pro está hecho de una sola capa de poliéster fino y tiene pequeños agujeros para hacerlo traspirable”, explica el texto sobreimpreso en el anuncio.
http://elpais.com/elpais/2017/03/13/estilo/1489418392_120544.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario