Rubí, el único municipio de Cataluña que conmemora el día de la Constitución española

Colectivos independentistas han intentado boicotear la lectura de artículos de la Carta Magna impulsada por la alcaldesa socialista, el PP y Ciudadanos

Casi como una aldea de resistentes galos, Rubí es la única localidad de Cataluña que este martes tenía previsto un acto institucional para celebrar el 38º aniversario de la Constitución. Los grupos municipales de Partit dels Socialistes (PSC), Partido Popular y Ciudadanos aprobaron en el último pleno de noviembre organizar la lectura de varios artículos de la Carta Magna, un acto que ha contado con la participación de la entidad contraria a la independencia Sociedad Civil Catalana y que ha culminado con un discurso de la alcaldesa, la socialista, Ana María Martínez. El acto se ha podido celebrar, pero miembros de la CUP y de ERC, junto con colectivos independentistas han tratado de boicotear la conmemoración con sirenas y gritos constantes durante los parlamentos y han quemado un ejemplar de la Constitución.

La conmemoración ha empezado a las 10 de la mañana delante del Ayuntamiento de Rubí, un municipio de 74.000 habitantes situado a 15 kilómetros de Barcelona y donde los socialistas gobiernan desde 2003. Anteriormente lo había hecho Iniciativa per Catalunya. Pocos minutos antes del inicio del acto ya se habían reunido una treintena de personas con banderas independentistas y pancartas. “Esta Constitución no nos representa”, rezaban estos carteles. Los concejales de la CUP y ERC han acudido acompañados por integrantes de la entidad independentista Òmnium Cultural, de las Juventudes de ERC y las Juventudes Nacionalistas de Cataluña (JNC), del PDECat. “Rubí es el hazmerreír de Cataluña”, ha afirmado Èric Zaldívar, el jefe local de JNC-Rubí. “El tripartito de PSC, PP y Ciudadanos defienden una Constitución que va en contra del progreso de Cataluña”, ha afirmado.

Cuando los representantes políticos de los tres partidos han iniciado la lectura de los artículos de la Constitución, las fuerzas independentistas han tratado de boicotearla con gritos a favor de la independencia, en contra del texto y exigiendo la dimisión de la alcaldesa socialista. La quema de un ejemplar de la Carta Magna no ha hecho más que agudizar la tensión que se vivía delante del Ayuntamiento de este municipio del Vallès Occidental. Algunos concejales y representantes de Sociedad Civil Catalana encargados de leer artículos del texto han concluido su parlamento con gritos de “viva Cataluña, viva España y viva la libertad de expresión”.

Finalmente, el acto ha culminado diez minutos antes de lo previsto con un discurso de la alcaldesa. “Nos reunimos de forma cívica y pacífica para celebrar el aniversario de nuestra Carta Magna”, ha declarado Ana María Martínez por encima de los cánticos independentistas. Martínez ha defendido una Constitución “reformada” que dé respuesta “a los nuevos retos y al encaje de las nacionalidades” en el conjunto de España y “renovada” que incluya a las nuevas generaciones.

La alcaldesa ha sido despedida con fuertes aplausos por parte de los asistentes al acto, y posteriormente estos han increpado a los manifestantes independentistas con gritos de “libertad” y acusándolos de “no demócratas”. Los jóvenes, a su vez, han respondido calificándoles de “fachas” pero los enfrentamientos no han ido más allá de las palabras.

“Rubí no quiere participar en los proyectos del Parlamento catalán para dividir a la ciudadanía”, ha afirmado Jonathan Cobo, portavoz del PP-Rubí. El grupo municipal popular fue el promotor de la organización de este acto institucional para celebrar el día de la Constitución que fue aceptada por los socialistas y Ciudadanos. Cobo ha respondido cuando ha sido preguntado por la quema del texto de la Carta Magna que “tomarán las medidas legales necesarias si se ha cometido algún delito”.
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