El Neuroma de Morton: una alteración que cursa con dolor

El Neuroma de Morton: una alteración que cursa con dolor

El Neuroma de Morton no ningún logaritmo ni tampoco una ecuación matemática, aunque suene a esto. Ni tampoco es una de esas enfermedades consideradas raras ni mucho menos una patología de pronóstico grave. Lo que sí está claro es que es una alteración de los pies y que duele bastante. Josep Manel Ogalla, podólogo y presidente del Col.legi Oficial de Podòlegs de Catalunya, explica sus síntomas y en qué parte del pie se localiza el Neuroma de Morton.
 
Síntomas
 Josep Manel Ogalla explica que “el síntoma que refieren los pacientes es un dolor a nivel de la planta del pie situado entre el tercer y el cuarto dedo”.  Se empieza teniendo pequeñas molestias y con el paso del tiempo se va incrementado llegando incluso a impedir la deambulación. Los pacientes comentan que “el dolor les puede obligar a pararse aunque estén en mitad de la calle, descalzarse y permanecer sin el zapato ya que no pueden seguir caminando”, añade el especialista en pie.  Es un dolor de tipo nervioso. Es una neuritis que se irradia hacia los dedos, da una sensación de quemazón, de pinchazo interior que va subiendo de intensidad.
 ¿Qué lo provoca?
 La causa que provoca el Neuroma de Morton es desconocida. El podólogo comenta que “no sé sabe porque el nervio que pasa por este espacio, el tercer y cuarto dedo, un día se hace más grueso de lo normal y se produce el Neuroma de Morton. Lo que sí se sabe qué factores ayudan a su aparición. Los zapatos estrechos de puntera y altos de zapatos son en parte los responsables”. El Neuroma de Morton afecta a los dedos menores, los pequeños y con predisposición al tercer y cuarto dedo.
 Diagnóstico
 “En una fase inicial el Neuroma de Morton se puede confundir con una metatarsalgia o una bursitis”, explica Josep Manel Ogalla. Pero cuando está avanzada no hay discusión. Con las nuevas técnicas de diagnóstico por la imagen, el diagnóstico de Neuroma de Morton es fácil.
 
Tratamiento

 El tratamiento del Neuroma de Morton depende del tamaño del nervio. El especialista explica que si “está por debajo de 5 mm se tratará para evitar su progresión”. Se aplicarán antiinflamatorios, altas dosis de vitamina B y se recomendará un soporte plantar para que abra este espacio intermetarsal y evite que estos microtraumatismos sobre el nervio se vayan produciendo. “Con estas medidas se frena el dolor y los pacientes puede hacer una vida normal”, comenta el podólogo. Pero cuando el nervio supere los 7 mm. de grosor, se deberá optar por el tratamiento quirúrgico.

El zapato que se recomienda a estos pacientes es de punta redondeada y ancho.

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