En su línea de vigoroso apoyo a la investigación con células madre adultas para curar enfermedades, el Vaticano celebrará el próximo mes de noviembre un congreso mundial de «alta divulgación» en el que intervendrán científicos, médicos, políticos, intelectuales y directivos de empresas de biotecnología. El objetivo, según afirmó ayer el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Pontificio Consejo de Cultura, es «divulgar a alto nivel el estado actual de la investigación y de las terapias, dar a conocer las enormes posibilidades de la medicina regenerativa y estudiar los aspectos éticos de estas actividades». Las células madre adultas no plantean problemas éticos, a diferencia de las células madre tomadas de embriones en sus primeras fases de desarrollo.
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