Dilma recibe a Obama en su primera gira sudamericana

• El presidente de EEUU pasará menos de 12 horas en la capital antes de ir a Río
• La reunión con la anfitriona debería marcar el regreso a una relación cordial
• Lula rechaza la invitación para unirse al almuerzo en el Palacio de Itamaraty

Barack Obama al fin sabe lo que es pisar suelo sudamericano. El presidente de EEUU aterrizó a las 07.30 de la mañana en Brasil, primera escala de una gira de cinco días que lo llevará también a Chile y El Salvador, y tres horas más tarde fue recibido por Dilma Rousseff en el Palacio de Planalto. El encuentro debe marcar el regreso a la cordialidad en las relaciones bilaterales después de una época de discrepancias entre la Casa Blanca y el 'lulismo'.

Acompañado por su mujer, Michelle, y sus dos hijas, Malia y Sasha, el mandatario estadounidense desembarcó sonriente del 'Air Force One' y fue trasladado al Hotel Royal Tulip, 'cuartel general' de su fugaz estancia en Brasilia. La familia pasará menos de 12 horas en la capital antes de poner rumbo a la segunda y última parada brasileña: Río de Janeiro.
Tras un breve descanso, Obama pasó revista a las tropas poco antes de las 10.30 horas y a continuación subió la rampa de Planalto. En lo alto lo esperaba Dilma, con quien en estos momentos mantiene una reunión privada a la que previsiblemente seguirá una declaración conjunta.

Picanha sin Lula

La agenda oficial divulgada en la noche del viernes por la Presidencia brasileña incluye la participación de ambos líderes en el cierre de un foro de empresarios de sus respectivos países en el Palacio de Itamaraty, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores.
También en Itamaraty se servirá el almuerzo, un menú tradicional brasileño que incluye el suculento corte bovino de la picanha y un plato elaborado con judías y arroz que se conoce como 'baião de dois'. El postre, más ligero: frutas tropicales y helado de graviola (guanábana).
Al banquete asistirán todos los ex presidentes vivos desde la restauración democrática a excepción de Luiz Inácio Lula da Silva, quien optó por rechazar la invitación alegando que no pretendía robar protagonismo a su sucesora. En cambio, sí acudirán sus predecesores José Sarney, Fernando Collor e Itamar Franco -senadores en la actualidad-, así como Fernando Henrique Cardoso.

El domingo, discurso

Poco después de las cinco de la tarde y con el estómago satisfecho, el primer inquilino negro del Despacho Oval embarcará de nuevo hacia Río para completar allí el resto de sus compromisos en el gigante sudamericano.
El domingo, Obama subirá al Cristo Redentor junto a su familia antes de pronunciar un discurso en el Teatro Municipal, en el centro de la ciudad. El evento iba a celebrarse al aire libre hasta que la delegación norteamericana alteró los planes alegando "preocupaciones" de seguridad vinculadas con la inminente intervención militar en Libia.
El gobernante podría visitar también la cinematográfica favela de Cidade de Deus (Ciudad de Dios), si bien ese aspecto sigue sin ser confirmado oficialmente. Situada en la zona oeste de Río, la comunidad se ha sometido en los últimos días a un lavado de cara para recibir a su invitado con un espectáculo de 'capoeira' y percusión.

http://www.elmundo.es/america/2011/03/19/brasil/1300535911.html