El triángulo Mario Vargas Llosa, Patricia Llosa e Isabel Preysler: se avecina un polémico divorcio
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Un tsunami ha sacudido a una de las parejas más estables de la literatura universal
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Mario Vargas Llosa sale, ha confirmado LOC, con Isabel Preysler
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El propio escritor ha confirmado la separación, obligado por las circunstancias
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Isabel no tiene relaciones con hombres casados. Pero Vargas Llosa aún lo está
Tras la de la recogida del Nobel, puede que esta haya sido la semana
más convulsa del clan Vargas Llosa. No sólo se ha publicado que el escritor mantiene una estrecha relación con Isabel Preysler, sino que, además, se está separando de su mujer, Patricia Llosa.
Conmoción en la sociedad peruana, corrillos en los círculos literarios y
terremoto en el papel 'couché' cuyo siguiente capítulo, avisan, será el
de una mediática y dura batalla judicial. Así se orquestó el anuncio de
la (sorprendente) pareja del verano.
Viene una larga batalla judicial y mediática para repartir el gran
patrimonio que la pareja ha ido acumulando en sus 50 años de matrimonio
Domingo, 7 de junio. Mario Vargas Llosa (79) e Isabel Presyler (64)
disfrutan de un agradable almuerzo en el restaurante 99 Sushi Bar,
situado en el madrileño Hotel Eurobuilding. Un local que suele
frecuentar la 'socialité' filipina. De hecho, sólo unos días antes, el
martes 2 de junio, se dejó ver por allí junto a algunas amigas, entre
las que se encontraba Carmen Martínez-Bordiú. Ese mismo día, el
escritor recogía el Doctorado Honoris Causa en la Universidad de
Princeton (Nueva Jersey) acompañado de toda su familia. Durante
el encuentro dominical, la pareja no ocupo ningún reservado, como se ha
estado apuntando estos días, ni se escondió de curiosas miradas.
Porque, como aseguran fuentes cercanas a Preysler, "a ella no le gusta esconderse y, si lo hiciera, hay sitios en la capital donde pasar desapercibidos".
Al terminar la comida, la pareja salió del restaurante cogida del brazo.
Un fotógrafo (uno) que se escondía a la salida del local, captó la
imagen que ha provocado un tsunami informativo. Fue publicada tres días
después en la portada de la revista '¡Hola!', cabecera
oficial de Preysler, cuya relación comercial surgida hace décadas ha
devenido en una relación familiar entre ambas partes. Tanto es así que
no hay ninguna información publicada de la 'celebrity' que no tenga su visto bueno y su confirmación.
LOC se ha puesto en contacto con varias agencias fotográficas para dar
con el autor de tan inocente y programada foto, ya que no aparece
firmada por ningún profesional. Al parecer, habría sido tomada por uno de los fotógrafos en plantilla de la revista, pero, cuentan, no fue Preyler quien les avisó.
Separados
Miércoles, 10 de junio. Las revistas del corazón salen a los kioscos y la noticia ve la luz. España entera averigua que Isabel Preysler, viuda de Miguel Boyer desde hace casi nueve meses,
y Mario Vargas Llosa (casado, que se supiera) "mantienen una amistad
que las circunstancias de sus vidas han hecho que se afianzará
últimamente", una elegante forma de decirlo todo sin decir nada.
Él ya ha hecho el primer movimiento societario:convertirse en administrador único de su fundación, creada en 2003
Pero atención, lo más relevante se podía leer en uno de los subtítulos: "Vargas Llosa está actualmente separado de su mujer, Patricia Llosa, con
la que mantiene una relación muy cordial", revelaba también la revista.
No sólo los lectores se enteraban de esta emergente relación a través
de esas fotos, sino también una de las afectadas, la hasta ese día y a
ojos de la luz pública, esposa de Vargas Llosa, Patricia Llosa (70), que recibió la noticia como un jarro de agua fría.
No es el primer encuentro público de la ex de Julio Iglesias y "el escribidor". A finales de mayo estuvieron juntos en Londres, en
la cena benéfica anual que organiza una de las organizaciones
solidarias del príncipe Carlos de Inglaterra y en la que, desde hace
años, colabora generosamente la azulejera castellonense Porcelanosa, de la que es imagen Isabel Preysler.
Según ha podido saber LOC, viajaron juntos hasta la capital británica, aunque separados del resto de los invitados españoles. Sí se hospedaron, en cambio, todos en el mismo hotel, el Ritz. Eso sí, Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa durmieron, aseguran, en habitaciones separadas.
Como era de esperar, y volviendo al miércoles, el bombazo informativo corrió como la pólvora y en cuestión de horas hasta en Perú, país
natal del Nobel, se hacían eco de la revelación, aunque no tanto del
nuevo romance en sí, como de la separación de Vargas Llosa y su esposa y
prima, con quien se casó en 1965, y con quien tiene tres hijos, Álvaro (1966), Gonzalo (1967) y Ximena Morgana (1974).
La viuda de Miguel Boyer está muy ilusionada con esta nueva relación
Las fotos y la nueva amistad de su marido (no es la única que le han
atribuido en su medio siglo de matrimonio) cogieron desprevenida a
Patricia y rodeada de gente. Ante el estupor de lo que estaba sucediendo
y la insistencia de los medios de comunicación de este y el otro lado
del Atlántico por conocer su reacción, fue su hija, Ximena Morgana (41),
fotógrafa de profesión y actualmente afincada en Perú, la que decidió zanjar la situación con un comunicado enviado a primera hora de la tarde en nombre de su madre: "Mis
hijos y yo estamos sorprendidos y muy apenados por las fotos que han
aparecido hoy en una revista del corazón. Hace apenas unas semanas
estuvimos con toda la familia en Nueva York, celebrando nuestros 50 años
de casados y la entrega del doctorado de la Universidad de Princeton.
Les rogamos respetar nuestra privacidad". Algunos medios han
llegado a publicar que Patricia se enteraba de su propia separación a
través de la prensa. Sin embargo, y según explican diversas fuentes a
LOC, lo que no se esperaba era ver unas fotos de su marido con otra
mujer.
Esas mismas voces apuntan que la reunión familiar de hace unos días
en Nueva York era para celebrar el doctorado del autor de La fiesta del
chivo, aunque no las bodas de oro de la pareja. Sin
embargo, Susana Abad, esposa de Álvaro Vargas Llosa (primer hijo del
matrimonio) colgó en su Twitter dos fotos del clan al completo junto a
la frase "Feliz 50 aniversario, Mario y Patricia!!!".
Ella, ilusionada
Lejos de calmar el revuelo, el comunicado lo avivó aún más. Preysler enmudece, no
coge el teléfono ni a sus más allegados. "La señora no está en casa",
"la señora no se encuentra" son las respuestas de villa Preysler.
'Han salido un par de veces. Se están conociendo sentimentalmente', confirma ra a LOC el entorno de Isabel
Jueves 11 de junio. Los reporteros y paparazzi de
medio país persiguen también a Vargas Llosa. El reportero del programa
'Sálvame' (Telecinco) consigue en exclusiva las primeras declaraciones
del escritor: "Lo único que le confirmo es que estoy separado,
no tengo más declaraciones que hacer. Que respeten la vida privada".
Tan sorprendentes fueron las palabras del Nobel como verle dando
explicaciones sobre su faceta personal. Quienes le conocen apuntan a que
nunca habría accedido de manera voluntaria a hacer visible su relación de ese modo. Y que, quizás, la publicación de la foto le ha obligado a confirmar su separación, desacreditando públicamente a su mujer y dejando a su familia totalmente "devastada".
Mientras, desde el madrileño domicilio del matrimonio Vargas Llosa,
Fiorella Battistini, asistente personal del Nobel, asegura a LOC que
"nadie va a hablar más al respecto. Entiendo el trabajo de los
periodistas, pero no hay nada más que decir", al tiempo que nos remite
al comunicado enviado por la hija, Morgana.
Por la tarde, el entorno de la ex mujer de Julio Iglesias, menos afligido
que el de Patricia, confirma que la nueva pareja (del verano) "ha
salido un par de veces. Se están conociendo, sentimentalmente". No
quieren, eso sí, entrar a valorar la actitud de Patricia Llosa, tercera
en discordia, aunque sí se atreven a asegurar que "Isabel no saldría jamás con un hombre casado. Ambos son libres y lo que tenga que pasar entre ellos, el tiempo lo dirá porque a partir de ahora no se van a ocultar".
Divorcio
No lo harán. Y eso que se avecina un polémico y mediático divorcio, a
tenor de lo turbio y confuso que ha sido el anuncio de la situación del
matrimonio del Nobel y su nueva "estrecha amistad". Además, hay un gran
patrimonio para repartir.
La prestigiosa agente literaria Carmen Balcells era hasta hace unos
años la que manejaba todos los contratos literarios del escritor
peruano. Debido a su estado de salud, es Patricia Llosa la que lleva el control absoluto de las finanzas de su marido. Los Vargas Llosa no sólo han ido adquiriendo prestigio literario y cultural sino que también han amasado una gran fortuna
a lo largo de su carrera profesional. Tienen viviendas en las mejores
zonas de Londres, Nueva York, Lima y Madrid. En la capital, aseguran
fuentes cercanas a la familia, el escritor atesora varios inmuebles en
el barrio de las Letras.
El entorno de Isabel Preysler niega que ella avisara al fotógrafo. En la revista, la imagen no aparece firmada
Sin embargo, y a pesar del prestigio literario del Nobel, a la
editorial Alfaguara le resulta imposible cuadrar el balance. El contrato
que la editorial firmó con Balcells para la reedición de toda la obra
de Vargas Llosa, que venía publicando Seix Barral, ronda el millón doscientos mil euros. Pero Mario es una máquina de hacer dinero aún a sus 79 años. Por el Nobel de Literatura, en 2010, ingresó algo más de un millón de euros; también cotiza al alza como conferenciante, articulista e incluso
hace unos meses debutó como actor en el Teatro Español, dónde percibió
alrededor de 10.000 euros por unas semanas de representación de 'Los
cuentos de la peste'. Es complicado seguir la pista de las empresas o
sociedades creadas por el matrimonio. En los archivos consultados por
LOC, sólo aparece una Fundación Internacional para la Libertad,
constituida en 2003 con sede social en la madrileña calle Serrano y de
la que, curiosamente, el pasado 27 de mayo el Nobel fue nombrado
presidente y único socio administrador. Quizás, éste fuera uno de los
primeros pasos hacia la separación de los bienes que durante años ha ido
adquiriendo el matrimonio, en régimen de gananciales.
A Isabel siempre le cuelgan la etiqueta de "caza fortunas", algo
que no es cierto. La reina del papel couché tiene asegurados
millonarios ingresos como imagen de varias marcas y por sus reportajes
en su revista de cabecera. Otra cosa es que necesite estar activa para ser rentable.
Tras un par de años casi apartada de los flashes por la enfermedad de
su marido, el huracán Preysler regresa con más fuerza que nunca.
Casi 30 años de amistad
La amistad de la viuda de Boyer y el escritor peruano comenzó en julio de 1986,
en San Luis, Misuri, cuando Preysler conoció a Mario Vargas Llosa
durante una entrevista que le realizó para la revista '¡Hola!'. A partir
de entonces, ella y su marido, Miguel Boyer, entablaron una bonita relación amistosa con
el escritor y su mujer, que se ha mantenido hasta ahora, y enturbiada
en algunos momentos por los rumores de un 'affaire' entre la filipina y
el peruano.
Curiosamente (o no) la relación entre el político y la filipina se conoció también a través de una foto indiscreta
Así, en 1989, cuando el escritor era el candidato de la derecha a la
presidencia de su país, en los cenáculos madrileños se empezó a hablar
de esa posible relación, tal y como recoge Juan Luis
Galiacho en su libro Isabel y Miguel: 50 años de la historia de España
(Esfera de los Libros). "Para apoyar esta tesis se buscaron como fuentes
'personas cercanas a Julio Iglesias', que estaban dispuestas a afirmar
las preferencias y la pasión irrefrenable de Isabel hacia el reconocido
literato". Bulos a los que el matrimonio hizo siempre frente con decoro, incluso interponiendo demandas en los juzgados correspondientes.
Mario y Patricia también hicieron oídos sordos a estos rumores y
continuaron su amistad con el matrimonio Boyer-Preysler. La última vez
que se pudo evidenciar fue el pasado 29 de septiembre, cuando Mario y Patricia acudieron al tanatorio Parque de San Isidro (Madrid) para arropar a Isabel y su familia tras la muerte del ex ministro Boyer.
En 1989 se rumoreó que entre Mario e Isabel había un 'affaire'. Ambos, casados, se tuvieron que enfrentar al bulo
Curiosamente (o no) la relación entre el político y la filipina se conoció también a través de una foto
indiscreta publicada en una revista. La imagen, en la que se podía ver a
Boyer entrando a escondidas en el chalé de Isabel, puso fin a su
matrimonio con Elena Arnedo, uno de los más estables de los socialistas y
dio origen a la época del cambio: cambio de pareja, de estatus social,
incluso de ideología. Así lo recoge Rosa Villacastín en 'El club de las
"santas"' (Ed. Temas de Hoy), éxito de ventas, al contar con todo
detalles los divorcios más escandalosos de la democracia. Pero no el
único.
A Carlos Falcó, marqués de Griñón y entonces segundo marido de Isabel, le ocurrió lo mismo que a Patricia Llosa esta semana. Una
mañana, al ir al kiosco, la revista Interviú publicaba un amplio
reportaje en el que se hablaba sin tapujos de las repercusiones del
romance entre Boyer y Preysler en la crisis abierta por su entonces
salida del Gobierno, tal y como relata Villacastín. El marqués se negó
durante tres años a aceptar la evidencia. Después puso punto y final al
matrimonio con la filipina.
No fue más elegante Mario Vargas Llosa cuando dejó a su primera mujer, Julia Urquidi, por la sobrina de ésta, Patricia, a través de una carta, fechada
el 10 de mayo de 1964. "[...] Es verdad que estoy enamorado de
Patricia, y sé que esto no es una revelación para ti [...]. Tú podrás,
quizás empleando armas indignas de ti, impedir que yo vuelva a ver a
Patricia. Pero ni tú ni nadie tiene cómo destruir mi amor por ella". En
el divorcio con Julia, el peruano le cedió los derechos de 'La ciudad y
los perros', aunque después se los quitó. Tal vez sea ésa, la cesión de
derechos, una de las fórmulas que el escritor utilice ahora, en su nuevo
y millonario divorcio.
@PilarVidal2014
@azucenasmancebo
Mario, Julia, Wanda y Patricia en la rue Valadon
París, 1960. Mario Vargas Llosa vivía con Julia Urquidi,
la tía Julia, los bellos años de la pobreza. Habitaban en un hotel, el
Wetter, hasta que Wanda, la prima de Mario, la sobrina de Julia, cayó
por la ciudad y propuso que se fueran a vivir los tres juntos a la calle
Grenelle. Allí, según se cuenta en 'Aquellos años del boom', de Xavi
Ayén (RBA), el matrimonio pasó algún apuro por los devaneos del escritor. Julia, agraviada, vivió algunas semanas con una amiga, pero volvió al hogar. Y entonces llegó una carta de Lima que anunciaba la llegada a Francia de Patricia,
la hermana de Wanda, aún adolescente. ¿Podían hacerle hueco? Julia no
quiso pero cedió y se preparó para otra mudanza, hasta la calle Valadon,
en el distrito Siete. Y ahí, cómo decirlo, la vida se fue deslizando.
Un día, JulioRamón Ribeyro se llevó a Patricia a un baile.Cuando
volvieron a casa, Mario la riñó como se riñe a una hija ¿O a una amante? RIbeyro tomó nota de que algo raro pasaba. En junio de 1962, Wanda murió en un avión camino de Lima.
En Perú, en pleno duelo, Mario le pidió a Julia que le dejara viajar
solo a París. Después volvieron a convivir pero su matrimonio era una
causa perdida. En 1964, de regreso a Lima para que Mario terminase 'La
casa verde', el escritor le envió una carta a Julia en la que le
confesaba que estaba enamorado de su prima. Llegó el
divorcio, en el que Vargas Llosa cedió a Julia los derechos de 'La
ciudad y los perros' y, un año después, la boda de los primos. Por esa
época, Carlos Barral solía hacer una broma cuando algún amigo atribuía
un romance al escritor: "No puede ser, si esa chica no es familia suya". García Márquez era más malvado: "La siguiente ya tiene que ser su hermana". Por LUIS ALEMANY
http://www.elmundo.es/loc/2015/06/13/557b4037268e3ec4638b4598.html