El alcance de la obesidad
La lucha contra el sobrepeso y la obesidad es un reto clave para
los sistemas de salud pública de los países ricos. Las consecuencias en
el metabolismo suponen el incremento de factores de riesgo que se
traducen desde hace décadas en más diabetes tipo 2, más infartos de
miocardio, aterosclerosis e ictus.
Esta semana la revista Lancet Oncology ha publicado un estudio que pone el foco de atención en otro aspecto: la relación entre el sobrepeso y la obesidad con las tasas de cáncer. Consideran que se han convertido en un factor de riesgo responsable de un 3,6% (481.000) de todos los nuevos casos de cáncer en 2012. El trabajo, realizado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), la institución especializada en cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), muestra que estos nuevos casos por año se pueden atribuir al alto índice de masa corporal.
Este índice, conocido por las siglas IMC, es una medida de la grasa corporal que se calcula dividiendo el peso en kilogramos por el cuadrado de la altura en metros. La OMS define el sobrepeso como un IMC mayor o igual a 25 kg / m2, y la obesidad como un IMC mayor o igual a 30 kg / m2. Un alto índice de masa corporal es un predictor de riesgo conocido para el cáncer de esófago, colon, recto, riñón, páncreas, vesícula biliar, mama posmenopáusico, ovario y endometrio, así como para otras enfermedades no transmisibles, como patologías cardiovasculares y diabetes.
Así, este nuevo análisis muestra llamativas disparidades mundiales. El cáncer debido al sobrepeso y la obesidad es actualmente mucho más común en los países más desarrollados (393.000 casos, el 5,2% de todos los nuevos casos de cáncer en estos países) que en los países menos desarrollados (88.000 casos, el 1,5% de los nuevos casos).
Según detalla el Servicio de Información de Noticias Científicas (SINC), Norteamérica sigue siendo el territorio más afectado, con 111.000 cánceres relacionados con la obesidad en 2012, lo que representa el 23% de la carga total de cáncer mundial vinculado a un IMC alto. También en Europa la proporción de estos cánceres es grande, sobre todo en Europa del Este (65.000 casos, el 6,5% de todos los nuevos casos).
Aunque en la mayoría de los países asiáticos esta proporción no es grande, sí se traduce en un considerable número absoluto de casos debido al gran tamaño de la población. Por ejemplo, en China cerca de 50.000 casos (1,6%) de cáncer en mujeres y hombres están asociados con el sobrepeso y la obesidad.
En cambio, la contribución del sobrepeso y la obesidad a la carga del cáncer sigue siendo baja en África (7.300 casos, 1,5% de todos los nuevos casos de cáncer en el continente). "Mientras que el número de casos de cáncer asociado sigue siendo más alta en los países ricos, son ya visibles efectos similares en algunas partes del mundo en desarrollo", explica Isabelle Soerjomataram, uno de los autores principales del estudio.
En EEUU, uno de los países más aquejados por estos cánceres asociados con un IMC alto, el 3,5% y 9,5% de los nuevos casos están relacionados con el exceso de peso corporal en hombres y mujeres, respectivamente.
"Las mujeres se ven desproporcionadamente afectadas por cánceres relacionados con la obesidad", apunta Melina Arnold, otro de los autores del estudio, "Por ejemplo, para el cáncer de mama después de la menopausia -el cáncer más común en las mujeres en todo el mundo-, el estudio sugiere que el 10% de estos cánceres se podrían haber evitado por tener un peso corporal saludable".
Los cánceres de endometrio, colon y mama representan casi tres cuartas partes (73%) de todos los cánceres ligados al IMC alto en las mujeres. En los hombres, los cánceres de riñón y colon juntos representan dos tercios (66%) de todos los cánceres asociados con un IMC alto.
Esta semana la revista Lancet Oncology ha publicado un estudio que pone el foco de atención en otro aspecto: la relación entre el sobrepeso y la obesidad con las tasas de cáncer. Consideran que se han convertido en un factor de riesgo responsable de un 3,6% (481.000) de todos los nuevos casos de cáncer en 2012. El trabajo, realizado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), la institución especializada en cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), muestra que estos nuevos casos por año se pueden atribuir al alto índice de masa corporal.
Este índice, conocido por las siglas IMC, es una medida de la grasa corporal que se calcula dividiendo el peso en kilogramos por el cuadrado de la altura en metros. La OMS define el sobrepeso como un IMC mayor o igual a 25 kg / m2, y la obesidad como un IMC mayor o igual a 30 kg / m2. Un alto índice de masa corporal es un predictor de riesgo conocido para el cáncer de esófago, colon, recto, riñón, páncreas, vesícula biliar, mama posmenopáusico, ovario y endometrio, así como para otras enfermedades no transmisibles, como patologías cardiovasculares y diabetes.
Así, este nuevo análisis muestra llamativas disparidades mundiales. El cáncer debido al sobrepeso y la obesidad es actualmente mucho más común en los países más desarrollados (393.000 casos, el 5,2% de todos los nuevos casos de cáncer en estos países) que en los países menos desarrollados (88.000 casos, el 1,5% de los nuevos casos).
Según detalla el Servicio de Información de Noticias Científicas (SINC), Norteamérica sigue siendo el territorio más afectado, con 111.000 cánceres relacionados con la obesidad en 2012, lo que representa el 23% de la carga total de cáncer mundial vinculado a un IMC alto. También en Europa la proporción de estos cánceres es grande, sobre todo en Europa del Este (65.000 casos, el 6,5% de todos los nuevos casos).
Aunque en la mayoría de los países asiáticos esta proporción no es grande, sí se traduce en un considerable número absoluto de casos debido al gran tamaño de la población. Por ejemplo, en China cerca de 50.000 casos (1,6%) de cáncer en mujeres y hombres están asociados con el sobrepeso y la obesidad.
En cambio, la contribución del sobrepeso y la obesidad a la carga del cáncer sigue siendo baja en África (7.300 casos, 1,5% de todos los nuevos casos de cáncer en el continente). "Mientras que el número de casos de cáncer asociado sigue siendo más alta en los países ricos, son ya visibles efectos similares en algunas partes del mundo en desarrollo", explica Isabelle Soerjomataram, uno de los autores principales del estudio.
En EEUU, uno de los países más aquejados por estos cánceres asociados con un IMC alto, el 3,5% y 9,5% de los nuevos casos están relacionados con el exceso de peso corporal en hombres y mujeres, respectivamente.
"Las mujeres se ven desproporcionadamente afectadas por cánceres relacionados con la obesidad", apunta Melina Arnold, otro de los autores del estudio, "Por ejemplo, para el cáncer de mama después de la menopausia -el cáncer más común en las mujeres en todo el mundo-, el estudio sugiere que el 10% de estos cánceres se podrían haber evitado por tener un peso corporal saludable".
Los cánceres de endometrio, colon y mama representan casi tres cuartas partes (73%) de todos los cánceres ligados al IMC alto en las mujeres. En los hombres, los cánceres de riñón y colon juntos representan dos tercios (66%) de todos los cánceres asociados con un IMC alto.
http://www.diariodesevilla.es/article/salud/1910889/alcance/la/obesidad.html